Envío tu música al compás de mi noria. Envío tus pies en cajitas de cartón. Envío tu abrazo a mi bufanda de rayas. Y tu peli, al jardín del Edén. Envío tus suspiros en forma de pepitas. De oro y de plata. Tus pecas, en cambio, a mi memoria.
¿Y tu piel? ¿A dónde va tu piel?
viernes, 7 de noviembre de 2008
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10 comentarios:
Sabes que no te puedo contestar esas preguntas. Eso sí, yo espero de vez en cuando alguna carta.
Bss
CH.
Mi piel.... al final de tu historia.
Mi piel bajo las caricias de mi amada.
Pocas palabras, pero intensas...
Saludos, Lara.
Precioso, Lara.
La piel, al cielo que viste tus ojos.
Un besito, guapa.
La piel siempre acaba convirtiéndose en polvo que arrastra el viento. Es lo de dentro, lo que guardas en tus cajitas y en la memoria, lo que siempre queda perenne.
Un beso
La suya a la tuya.
Y viceversa.
Magnetismo.
También pensé en contestar "A Correos", pero luego vi que podía sonar obsceno.
Conmigo. Lejana a las manos, adherida al recuerdo de lo no vivido...
Lo de "tus pies en una cajita de cartón" me ha dado un poco de yuyu, la verdad... jejeje.
Siempre tocas algún sentimiento de los que llevo muy adentro. Al referirte a la piel, me has recordado a los seres queridos que ya no tengo a mi lado, porque han fallecido, y que cuando pienso en ellos lo que más echo de menos es precisamente el poder tocarles, el poder sentir su piel. Pero también se puede aplicar a las personas que tenemos lejos, viviendo en otros lugares... Yo al menos me he planteado así esta nueva entrada que has escrito.
Creo que eso es quizá lo mejor de todas estas palabras que nos regalas, que son tan humanas que cada uno las puede recoger y aplicar a su manera, a su propia vida, como mejor le parezca...
Un abrazo.
Desde mi "lugar" de la Huerta.
Che, ¿tu no puedes contestar?, no me lo creo.
Manu, palabras cual fotogramas.
José, tan intensas como lo que tu dices y con el sentimiento que das.
Lidia, GRACIAS
Temmpus, efectivamente nos queda la memoria. Por eso, propongo cuidarla. Mimarla.
C.Chasse, efectivamente. Eso es lo que quería. Ah, y correos es una buena acepción.
Artemiza, preciosas palabras.
Lugareño, lo bonito de las letras es que cada uno las adapte a su "huerto". Cada cual con sus historias y con sus personas. Para las palabras todo está permitido.
Besos valientes.
Lara
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