sábado, 25 de diciembre de 2010

VUELO 181: Navidad...

Lo mejor de la Navidad eras tú. Tu cara de sorpresa que me recordaba cuando yo era niña. Cuando jugaba a ser mayor sin saber que Nunca Jamás abandonaría Peter Pan. Me atrapó, como tú.
Lo mejor de la Navidad es cuando jugabas al escondite conmigo y tus regalos. Derecha, izquierza...hacia un lado...Caliente, caliente... Abría canciones, colores y abrazos. Abría un trocito de tu coraza y de la mía. Abría mi vida para que surcaras en ella y yo comía de tus sueños.
Lo mejor de la Navidad es cuando me abrazas y me dices "Mira la chimenea, disfruta del fuego".

domingo, 19 de diciembre de 2010

VUELO 180: Cerquita...

Verte sonreir a través de un teléfono. Sentir tu músculo izquierdo: tic, tac, tic, tac... y saber que esta mañana tu zumo preferido querías compartirlo conmigo. Tu calorcito me llegó a través de tus palabras y guiños. De tus emociones y de tus sueños... Y me sentí bien, agustito conmigo misma, contigo... y recordé porque aún te quiero.

Tic, tac..

jueves, 9 de diciembre de 2010

VUELO 179: Sin Sentido

Vaciarme no es tan fácil como pensaba en un principio. Pensaba que solo tenía que vomitar. Vomitar mis miedos, mis deseos, mis pesadillas, mi corazón en batido y todo sería suficiente.
Imaginaba llegar, escupir el odio, la pasión, la vida y mis ganas. Pensaba que era fácil, pensaba que lo logaría: Tan sencillo como jugar a los dados, como lamerse las heridas cuando no había sangre ni verde ni azul. Un escalestrix sin vida. Sin sentido.
Y lo peor es que me muero de ganas... Pero también de miedo.

domingo, 21 de noviembre de 2010

VUELO 178: Querer de Kerer...

No dejo de sentirme vacía pero con la nula posibilidad de llenarme, ni tan siquiera un poquito.
No logro vaciarme porque esto significaría desprenderme de ti, de él y de mí. Y no me gusta sentirme sola. Respirar sola sin compás, sin cronómetro de aire y sin caleidoscopio de estrellas.
Porque mi músculo izquierdo se paraliza, lleva enquistado conchas de arena y playa. Lleva tus lunares y mis asteroides. Desprenderme de ti, significa un cielo de tormenta en mis venas, puentes en desiertos y abrazos a la almohada.
Y ya ves, yo utilizo el querer como terapia para no sentirme sola...
Querer de Kerer.


viernes, 1 de octubre de 2010

VUELO 177: Tu pez, yo pájaro...

¿Qué son las distancias? 5 pasos hacia adelante. 2 hacia atrás. 8 calles y 3 manzanas y media si vivieramos en New York. 7 canales en Amsterdam. Y 12 suspiros. También 9 ciudades y carreteras montañosas rumbo a Biarritz con un asteroide blanco. Distancias en países, incluso en continentes. Yo allí. Tu aquí, en el mar. Tu pez, yo pájaro.
Distancias, tic-tac, tic-tac... ¿Qué son las distancias si existen los sueños? ¿Qué son los kilómetros si puedo volar a la velocidad de la luz? ¿Qué son si existe el abrazo?

jueves, 2 de septiembre de 2010

VUELO 176: Tres...

Sé que ha llegado el día. Sé que tengo que levantarme, alzar de nuevo mis alas y volar. Sé que no puedo torturarme. No puedo ahogar mariposas en téquilas, ni tan siquiera en nesteas. Sé que es el momento de cerrar la puerta y quizá no abrir ventanas. Pero resulta que mi corazón no se ha roto en dos, se ha roto en un puto número primo. Y no tiene escapatoria. Sé que duele. Y dolerá.

Intento que mis manos naveguen solas, las muevo como mis alas. Sé que tengo que hacerlo. Sé que no puedo borrar los abrazos no dados y los "te quieros" dormidos. Sé que tu sigués en el lado derecho de la cama. Sé que él sigue solo en su cama. Y sé que yo no tengo cama. Sé que ya no duermo porque sé que ya no sueño.
Y sé que este puto número primo destrozará mis ojos. Y quizá mis alas.

domingo, 22 de agosto de 2010

VUELO 175: Corrientes...

Ha pasado más de un mes. No había palabras. Se habían ahogado. Bebían demasiados tequilas. Incluso sin limón.
Ahora tampoco salen como a mí me gustarían. Quizá necesitaba un poco de lluvia, para que lo "malo" lo llevará la corriente, se fuera, me dejara ser más yo. Y menos tú. Pero este verano es caluroso. Sofocante. Incluso a veces mi piel no puede respirar. Se ahoga como mis palabras.
Pero ya ha pasado un mes. Ya se han ido algunos demonios. Y han vuelto otros. Pero mientras hacemos las presentaciones oportunas intentó vocalizar, escuchar música y no convertir más "El país de las maravillas" sin maravillas y sin conejos con chistera.
Un mes y dos días. Y vuelven las letras... pero yo ya no vuelvo entera.

martes, 20 de julio de 2010

VUELO 174: ?

¿Y ahora?

lunes, 12 de julio de 2010

VUELO 173: Lunes llora...

Mi lunes llora. Tiene miedo que te escapes, y que el jueves ya no estés. Y el sábado cojas tus maletas rumbo a ninguna parte.

Mi lunes grita, sueña con elefantes y con tu música. Y curiosamente el tocadiscos se estropeó, o lo estropeaste, qué más da. El caso es que está roto. Como el lunes, el martes... como yo.

miércoles, 30 de junio de 2010

VUELO 172: Te escondes

¿Jugamos al escondite?, me preguntaste. Y poquito a poco desapareciste...

El reloj sonó, hizo su apuesta particular. Y yo la mía. Sabes que siempre me gusto el azar. Las casualidades y el número 4. Y también sabes que te espero. Nunca quise ser Penélope, ni esperar a Godot, pero la literatura me persigue.

Otro día más. Y por su puesto, sigues sin aparecer. Parece que algo, por fin se te da bien.

jueves, 17 de junio de 2010

VUELO 171: Bésame...

Siempre he querido que me beses así. Siempre quise ser tu pastel de fresas y mora, y tú, tu mi mus de chocolate con menta. Menta que saborearía despacito, poquito a poco mientras tú me muerdes los dedos de los pies. Yo me reiría y te mancharía la camiseta roja, esa que pone "Los Goonies" y que me recuerda a coca cola sin cafeína.

Después, tú me harías cosquillas mientras vas digiriendo la fresa. Y yo no podría hacer otra cosa que reírme, reírme sin parar. Entonces, tú me taparías la boca con un beso. Precisamente, ese beso.

miércoles, 9 de junio de 2010

VUELO 170: Te perdí...


Quería decirte tantas cosas que mi voz se ahogó. Unas cuantas palabras se adelantaron. Otras se cansaron de esperar y se fueron a dormir a la caja del Scrable. Y, en cambio, unas pocas se lanzaron cual flecha sin diana.

Y ya ves, ahora no me salen. No consigo disfrazarlas, ni tan siquiera puedo vestirlas con sombrero. Por eso no escribo. Por eso no te leo. Por eso ya no me lees. Por eso te pierdo. Por eso te perdí.

martes, 1 de junio de 2010

VUELO 169: Muévete...

Hace tiempo que dejé mi almohada abierta para que entraran tus golondrinas. Hace tiempo que me acuesto desnuda, sin ropa, para ser más yo y menos tú.

Y ahora, cuento los segundos. Vigilo tus sueños a cambio de cometas. Rompo en mil pedazos los "the ends" de la estantería y te fotografío con mi iris de plastilina.

Ahora te toca a ti...

domingo, 23 de mayo de 2010

VUELO 168: Lost Love

Porqué yo tampoco sé que haría si me quedara sin ti el mismo día que sin Lost.

Porqué yo también quiero líneas del tiempo alternativas.

Porqué tú también eres mi constante.

Porqué te quiero.

martes, 4 de mayo de 2010

VUELO 167: In other world...

I lost my dreams in your pillow...
I missed your lips in my back....
I imagined a world without war in your mouth...
I fly, I fly, I fly...

viernes, 23 de abril de 2010

VUELO 166: Precisamente


Precisamente porque me gusta volar te cojo en mis brazos. Precisamente porque quiero soñar duermes en mi almohada. Precisamente porque me estrujes el alma te dejo en la esquina (justo al lado de la pipa de la paz). Precisamente porque soy la "princesa de la boca de fresa" te saboreo y te huelo. Precisamente porque eres mi oxigeno te necesito. Y te resucito.

lunes, 12 de abril de 2010

VUELO 165: Aquí

Porque en París es muy fácil echarte de menos. Porque las calles de Montmatre me recuerdan a ti. A mi bici voladora y a tus patines mágicos.
En París es normal que te vea en cada escalera y que cada farola cuando se ilumina sea tu guiño. Me lo envías en la distancia, lo sé.
Aquí, no necesito soñarte porque duermes a mi lado. Aunque no compartamos las sabanas ni la almohada. Aquí desayuno croissant mientras tú te bebes la vida a sorbos. Me bebes a sorbos.

miércoles, 17 de marzo de 2010

VUELO 164: Escucho...

¿Cómo puedes decir que estás muerto, si yo escucho cada día tu corazón?
Tic, Tac...

jueves, 11 de marzo de 2010

VUELO 163: Golondrinas...


Me quitaste las hormigas que revoloteaban entre mi almohada. Me bebiste el alma cono un zumo de piña y mango. Y me sacudiste las alas. Decías que estaban sucias, que llevaban mucho tiempo paradas y querías que las moviera. Parecías Jane Fonda en clase de gimnasia pero sin mallas ni cometas.

Querías que volara porque asegurabas que te llevaría conmigo. Que recorreríamos planetas y recogeríamos rosas de todas ellas. Me da igual tu flor de loto en el brazo, decías. Que se ahogue si quieres, que nade entre las aguas pero tú recogerás golondrinas. Y aquí estoy esperándote. Soñándote. Anhelándote.

jueves, 4 de marzo de 2010

VUELO 162: Invento...


Te echo de menos desde el primer día. Desde el primer segundo. Te echo de menos desde el momento en que te inventé. Desde ese instante en que decidiste pasearte por mis sueños, para quedarte. Para invadirme con toda tu risa y con tus mordiscos noctámbulos.

Te echo de menos porque te inventé con todas esas cosas que a mí me gustan. Con cerezas en las orejas y con el pelo naranja. O azul. Eso era lo de menos. Te echo de menos porque conseguí que siempre me respondieras con guiño final, con puntos suspensivos. Y claro, no puedo dejar de pensar como te gustaba jugar con mis uñas rojas como si fueran piezas de dominó. Y claro, tampoco puedo olvidarme de como buscabas mis alas. Tatuadas. Dibujadas. Bailadas.

sábado, 27 de febrero de 2010

VUELO 161: Bailar...

Chiquitita, se desliza entre las sabanas rumbo a ese nudo caleidoscópico. Al de Nunca Jamás. Pero sin Peter. Sin alas.
¿Por qué ya no bailan los girasoles?

lunes, 22 de febrero de 2010

VUELO 160: Me gustaría...

Me gustaría acercarme. Me gustaría seguir tus pisadas. O que tú siguieras las mías. Pero no puedo. No puedo.

miércoles, 10 de febrero de 2010

VUELO 159: Madrid...

Me gusta Madrid porque viajo a las profundidades de tu ombligo mientras tú paseas entre mis piernas, rumbo a ninguna parte. O a todas. Me gusta Madrid porque de repente estoy en Chigago vestida de ganster o paseando entre calles indias con olor a curry y a vida. Me gusta Madrid y caminar entre charcos y un Starbucks en mi mano. Otro en tus labios. Me gustan sus mimos, sus ruidos y los tuyos. Me gustan las señales y desayunar mientras tu acaricias mi mano.

Me gusta Madrid porque aquí, aunque estés lejos, no te echo de menos.
Madrid sin pausas. Sin prisas.

domingo, 31 de enero de 2010

VUELO 158: Quizá...

Quizá no sabes que estoy aquí. Quizá no sabes que estoy cerquita, esperando una palabra, una llamada o una caricia. Quizá no sabes lo mucho que te eché de menos. Ni tan siquiera que esperé una carta electrónica en la que me dedicaras una poesía o un post. Quizá no lo sabes, quizá no te lo he dicho.

Quizá sea tarde. O quizá no.

sábado, 23 de enero de 2010

VUELO 157: Sin humo

Quiero conocer el futuro a través de las yemas de tus dedos. Quiero jugar a los dados y que salga un número primo. Y quiero morderte y que te duela. Y no abras más puertas, sino sabes cerrar mis alas.

Saltar baldosas impares mientras bebo nestea y canto canciones estúpidas. Sin cigarrillos. Sin humo.